lunes, 24 de septiembre de 2012

ESTILOS PICTÓRICOS- Parte 1: ABSTRACCIÓN


En la mayoría de los casos, los pintores se han adscrito a un determinado estilo artístico. Este estilo suele estar determinado por la época en la que el pintor ha vivido. En épocas anteriores al siglo XX, lo normal es que los artistas trabajaran sus obras en el estilo que imperaba en esa época y en su propio país. A veces ocurría que en países diferentes de Europa imperaban estilos diferentes, pero la tendencia general a lo largo de la historia es que los estilos fueran similares en todos lados de Europa.
Otra cosa muy diferente empezó a ocurrir a principios del siglo XX. En esta época surgen lo que llamamos las Vanguardias. Las Vanguardias eran estilos artísticos que fueron surgiendo durante el siglo XX y que se daban todas más o menos a la vez. Así, unos  artistas se adscribían a un determinado estilo y otros a otro. Cada una de estas vanguardias solía tener un “manifiesto”, que es un texto que explica lo que ese estilo pretende, lo que rechaza y lo que toma. Algunas tenían un jefe y funcionaban como un club en el no todo el que quisiera podía entrar.

En esta primera parte de “Estilos Pictóricos”, vamos a tratar una de estas vanguardias: la abstracción.
La abstracción es un modo radicalmente nuevo de entender el arte. La pintura abstracta no intenta representar los objetos que nos rodean, ni paisajes, ni personas… ni nada de nada; lo único que pretende es distribuir formas colores líneas etc.… en el cuadro compositivo, es decir, en el lienzo. La manera de distribuir estos elementos crea en el espectador una “experiencia” visual de un tipo o de otro. Esto es todo lo que pretende la pintura abstracta y esto es algo que casi nunca se había hecho porque los pintores siempre se habían preocupado por representar “algo” de una forma o de otra.
Veamos un primer ejemplo de pintura abstracta:
Cuando veas una pintura abstracta (como esta de Kandinsky), debes saber que el pintor no ha intentado representar ningún objeto. Debes simplemente ponerte delante del cuadro y mirarlo de forma general, sin fijarte en nada en concreto, y dejar que la sensación te envuelva. Luego puedes pasear tu vista por los diversos elementos del cuadro, pero sin olvidar que lo importante es la sensación general que no ofrecen las combinaciones de colores, líneas y formas. La pintura abstracta es muy parecida a la música: el compositor musical coloca notas, ritmos y demás a lo largo del tiempo; esto es lo mismo que hace un pintor abstracto pero colocando, formas, colores y líneas a lo largo del plano. A esto, en pintura también se le llama “composición”.

Veamos otra composición abstracta:
Este cuadro de Kandinsky se llama “Composición 7”… Observa el amasijo de formas colores y líneas crea una gran sensación de movimiento; a esto lo llamamos “dinamismo”. Esta sensación la ha conseguido el pintor agrupando los elementos más o menos en diagonal y procurando que la mayoría de ellos no tenga una forma horizontal ni vertical, si no inclinada. La sensación tan colorida la ha conseguido usando colores muy diferentes: colocando frío al lado de cálidos y también parejas de complementarios. Es un cuadro bonito e impactante, aunque no represente nada… Kandinsky es considerado el primer pintor abstracto; es el primero que hizo pintura abstracta de forma consciente. Antes de pintar estos cuadros se dedicaba a representar “cosas” pero de forma muy poco convencional. Al final, las cosas que pintaba eran tan extrañas y deformadas que decidió liberarse de ellas e inventar la abstracción.

Veamos otro ejemplo de otro pintor abstracto: Pollock
Aquí también observamos un amasijo bastante homogéneo de pinceladas y manchas. El pintor ha utilizado colores muy parecidos, todos dentro de la gama de los cremas. A veces ocurre que las composiciones abstractas como esta nos sugieren “algo”… algo que no podemos decir muy exactamente lo que es. Si miramos este cuadro en general, sin fijarnos en nada concreto, percibimos una “textura” porque los elementos  están distribuidos de forma homogénea por todo el cuadro: no hay más en una parte del cuadro que en otra. Esto nos puede recordar a la textura de cosas o materias que conocemos, pero no deja por ello de ser un cuadro abstracto…

Veamos otro cuadro del mismo pintor:
Aquí Pollock ha realizado el cuadro dejando gotear y chorrear  la pintura sobre el cuadro. A esta técnica pictórica se le llama “dripping” (de gotear en inglés..). Aunque pueda parecer que es una técnica fácil y poco cuidadosa, requiere saber mucho de pintura pues hay que saber controlar el tiempo de secado de cada capa y hay que saber dar a la pintura la fluidez correcta y muchas cosas más. También hay que saber elegir muy bien los colores y en qué orden aplicarlos…

Veamos ahora un cuadro de otro pintor importantísimo llamado Paul Klee:
Este cuadro se llama “Sonido antiguo”. Como puedes ver, está compuesto por una red de cuadrados ligeramente deformada. Estos cuadrados tienen colores que están dentro de una gama más bien cálida y otoñal. El pintor se preocupó mucho a la hora de elegir y fabricar cada uno de los colores de cada cuadrado para que el efecto general de la composición recordara a cosas antiguas y viejas. También se ha preocupado mucho de las pequeñas deformaciones en la red de cuadrados, para que produzca un efecto agradable. Aquí queda muy claro que la pintura abstracta intenta crear sensaciones sin representar “cosas”. Para crear cuadros como este hace falta saber muchísimo sobre los  colores y sobre cómo funcionan.
En la siguiente imagen aparece otro cuadro de Paul Klee. Es un cuadro abstracto pero podría parecer que representa “algo”, es decir, “algún objeto” o paisaje. ¿A qué cosa crees que se parece esta composición abstracta?...
¡Efectivamente! … Este cuadro “totalmente abstracto” de Klee tiene un poco de “truco”: las líneas que forman los cuadriláteros de colores se acercan hacia la parte superior del cuadro. Esto nos hace percibir la imagen como una perspectiva en la que las cosas que están más lejos se ven más pequeñas. Además, los colores de arriba (lejos) son más fríos que los de abajo (cerca), exagerando más esta sensación de perspectiva. Así, casi todo el que ve este cuadro percibe una especie de camino a carretera en el centro. Este cuadro se llama “Camino”, y es que a veces los pintores abstractos como Paul Klee intentaban que viéramos “cosas” en sus cuadros abstractos… pero, a pesar de esto, este cuadro es abstracto…