Veamos un primer ejemplo de pintura abstracta:
lunes, 24 de septiembre de 2012
ESTILOS PICTÓRICOS- Parte 1: ABSTRACCIÓN
Veamos un primer ejemplo de pintura abstracta:
jueves, 16 de septiembre de 2010
LUZ Y SOMBRA - Parte 5: LA SOMBRA EXPRESIVA
Giorgio de Chirico fue un pintor italiano, creador la llamada “pintura metafísica” a principios del siglo XX, un estilo que se podría incluir dentro del famoso “surrealismo”. En esta pintura metafísica aparecen espacios marcados por la perspectiva de extraños edificios, por maniquíes, estatuas y otros objetos de extraña apariencia y utilidad. Todo nos transporta a un mundo onírico (de los sueños) en el que los elementos del cuadro se relacionan de forma absurda o enigmática. El significado del cuadro permanece en el misterio. Veamos un ejemplo
Observa que De Chirico utiliza las sombras alargadas que produce una puesta de sol o un amanecer. Estas sombras alargadas consiguen dar más espacialidad y perspectiva al cuadro. Expresan soledad y melancolía en medio de esos espacios amplios y misteriosos. Así, las sombras alargadas le sirven a Chirico para expresar sensaciones al espectador.
En este otro vuelve a ocurrir lo mismo: las sombras alargadas expresan muy bien la hora del día. La combinación de objetos es absurda y misteriosa, y nos obliga a seguir mirando el cuadro en busca de una posible respuesta que nunca encontramos. Esto nos crea una sensación inquietante. ¿Están de alguna forma vivos estos extraños seres compuestos de un ensamblaje de varios objetos? o ¿alguien los ha montado y los a dejado allí? y ¿para qué? Por todas estas preguntas, decimos que Chirico es un pintor onírico, porque estos espacios y estos objetos podrían perfectamente aparecer en nuestros sueños...
En este otro cuadro de arriba están otra vez presentes las alargadas sombras y las solitarias arquitecturas. No podemos descubrir qué son esos objetos, ni que hacen en ese extraño lugar.La conclusión es que podemos incluir en nuestros cuadros y dibujos este tipo de sombras alargadas para expresar la hora del día (amanecer-atardecer), la soledad, la melancolía y la perspectiva, como hacía Giorgio de Chirico. Nos despedimos de él con otro enigmático cuadro.
Tanguy utiliza unas sombras muy parecidas a las de Chirico, pero sus objetos y sus espacios son muy diferentes. Los objetos son totalmente incomprensibles y extrañísimos, parece que fueran algún tipo seres vivos mezcla de huesos, de vegetales de pulidas piedras y de restos de esculturas. Sus espacios son muy difusos y desvaídos, como si se tratara de dunas del desierto. El horizonte y la lejanía se funden y difuminan. Veamos un ejemplo.
En estos otros tres cuadros de arriba, se mantiene lo que ya hemos dicho en el primero. Además observamos que, con imaginación, podría tratarse de fotografías de extrañas formas de vida en otros planetas. Aunque estos cuadros no tengan ningún sentido, se experimenta “placer estético” al verlos e inquietan nuestra fantasía.
El tercer pintor que vamos a comentar es muy diferente a estos dos; se llama Edward Munch. Era de Noruega y se puede decir de él que es el iniciador del “Expresionismo”. Esta vanguardia de principios del siglo XX se preocupaba por expresar en sus cuadros el interior del ser humano: sus angustias, sus miedos, su soledad... Para conseguirlo pintaban las figuras deformadas y utilizabas colores violentos con pinceladas rápidas y desordenadas. Así intentaban expresar el interior del ser humano y no sólo su apariencia externa y visual. Veamos un primer ejemplo de Munch.
Acabamos con un autorretrato del propio Edward Munch en que la sombra es utilizada otra vez de la misma forma.
lunes, 23 de noviembre de 2009
LUZ Y SOMBRA - Parte 4: EL CONTRALUZ
Se llama “contraluz” al efecto de iluminación en el que el “foco luminoso” se encuentra justo enfrente del observador. Cuando la luz da directamente en nuestros ojos, ocurre que no podemos ver las zonas iluminadas de los objetos que tenemos delante. Sólo podemos ver las zonas en sombra de los objetos que tenemos delante, porque las zonas iluminadas quedan “al otro lado”, es decir, ocultas. Entonces, sólo podemos ver las zonas del objeto que están en sombra; por eso vemos a las figuras en un tono muy oscuro y casi no podemos distinguir nada de ellas, aparte de su “contorno”.
Este es un efecto muy utilizado en pintura, fotografía y cine. El resultado es que vemos un fondo muy luminoso sobre el que se recortan las siluetas de las figuras en un tono muy oscuro o negro. Es algo parecido a las “sombras chinescas”...
Aquí abajo tenemos el ejemplo de una fotografía de Quim Fábregas:
En los cuadros, o en las fotos, aparecen muy a menudo escenas en las que no todas las figuras están al contraluz, si no que algunas aparecen iluminadas de frente y otras se nos presentan al contraluz. El siguiente cuadro, es muy famoso y el pintor que lo hizo es también muy famoso (ya ha salido en el capítulo anterior). En él hay un personaje que se encuentra “al contraluz”. A ver si descubres cuál es el personaje y quién es el pintor del cuadro... y cómo se llama el cuadro...
Veamos otro cuadro (mucho más moderno) en el que hay una sola figura al contraluz y en el que las demás figuras se ven iluminadas de frente:
Habrás observado que la figura del centro del cuadro está al contraluz. La luz está delante de ella, por eso sólo podemos ver su parte en sombra, mientras que los demás personajes se ven más iluminados porque podemos ver las zonas iluminadas de sus cuerpos y de sus caras. El cuadro se llama “Comedores de patatas” y fue pintado por “Van Gogh”. Las personas retratadas por Van Gogh en este cuadro se dedicaban a cultivar patatas y, como eran unos campesinos muy pobres, no tenían otra cosa para comer...
Aquí abajo tienes otro cuadro de George de le Tour en el que aparece un contraluz “parcial” en una de las figuras:
Me despido con otro cuadro famoso de un famoso pintor español. En él verás a un personaje (o personaja) que se ve en contraluz. Pero en este caso el personaje que está en un contraluz poco intenso, es decir, que no aparece recortado en negro si no que aparece un poco más oscuro que los demás. ¿Cuál es el personaje?...
miércoles, 28 de octubre de 2009
LUZ Y SOMBRA - Parte 2: SOMBRAS AZULES EN DIAS SOLEADOS
Primero tenemos que saber que cuando la luz se refleja en una superficie de un color sale reflejada de ese mismo color. Por ejemplo: si la luz se refleja en un objeto rojo, saldrá reflejada luz de color rojo (el resto de colores que contiene la luz blanca se absorbe....). Cuando esa luz roja ilumina a otro objeto, este se ve “teñido” de rojo.
En los días de sol, el cielo es de color azul. Esto hace que la luz blanca del sol se refleje en este cielo, y como este cielo es azul la luz que sale reflejada es también de color azul. Esta es la razón por la que las sombras en días soleados se ven azuladas. Si no lo habías notado nunca, a partir de ahora te fijarás más y notarás ese tono azulado de las sombras en los días soleados. Este efecto azulado se nota mucho en las sombras que hay en los objetos que son blancos y en las superficies brillantes.
Aquí tienes algunas pinturas de Sorolla en las que se aprecia muy bien este efecto:
Habrás observado, en estos cuadros de Sorolla, que se percibe perfectamente en las escenas representadas que el día era muy soleado y de cielo muy azul, sin necesidad de que aparezcan el cielo y el sol. Eso es porque las sombras están recibiendo luz azul desde el cielo, luz que nos llega desde todos lados, mientras que las zonas iluminadas directamente por el sol tienen una luz caliente (amarillenta). Las sombras no reciben la luz directa del sol, pero sí reciben la luz azul que sale reflejada del cielo.
El pintor Sorolla utilizaba muy a menudo estos efectos de sombras azuladas, así como la mayoría de los pintores impresionistas. Los pintores impresionistas conocían muy bien estos secretos de las sombras de color.
Aquí tienes otro cuadro de Renoir, otro pintor impresionista, en el que se aprecia muy bien este efecto:
Habrás observado que las zonas del vestido de la chica que están iluminadas por la luz directa del sol, son de color cálido, mientras que las zonas que están en sombra son de color azulado.
Finalmente, aquí tienes otro cuadro de Edward Hopper en el que se aprecia este azulamiento de las sombras:
LUZ Y SOMBRA - Parte 1: LAS SOMBRAS TAMBIEN ESTAN ILUMINADAS
Empezaremos dejando claro que existen dos tipos de sombras: las propias y las arrojadas. La sombra propia es la parte de un cuerpo que no recibe la luz directa, quedando su tono más oscuro que la parte iluminada. La sombra arrojada es la que “arroja” un cuerpo sobre otro; esta sombra se produce por la interposición de un cuerpo ante los rayos luminosos de forma que tampoco recibe la luz directa y es más oscura que la zona que sí recibe la luz directa. Esto es algo que todo el mundo sabe, pero nos conviene distinguirlas claramente para poder analizar las diferencias entre una y otra.
Es este dibujo de Richard Brown se aprecia de forma clara la diferencia entre ambos tipos de sombra:
Lo que hemos de dejar claro en este capítulo es que ambas sombras (arrojada y propia), a pesar de no recibir la luz directa de la fuente luminosa (sol, bombilla...), sí reciben luz indirecta. La luz indirecta es la que ha rebotado (se ha reflejado) en un cuerpo y luego ilumina a otro cuerpo. De esta forma, una zona de sombra seguirá recibiendo luz, es decir, que no es totalmente oscura si no simplemente más oscura. Cuando una pintura o un dibujo producen un agradable efecto de realismo es porque el pintor conoce estos efectos lumínicos y sabe aplicarlos a su cuadro o a su dibujo, y no solo porque el dibujo contenga muchos detalles.
Vamos a ver claramente estos efectos en este cuadro de Edward Hopper titulado “Sol matutino”:
Observa que la espalda de la mujer está más oscura que su parte de adelante. Sin embargo, esa parte no es negra ni carece de color, pues está recibiendo la luz reflejada por las paredes y la sábana. También la sombra arrojada por la mujer sobre la cama es más oscura que la parte iluminada de la sábana, pero recibe luz reflejada por las paredes e incluso por el camisón rosa de la mujer. Observa, incluso, como algunas partes de las piernas (las que están encaradas con la sábana: tobillo y pantorrilla) reciben mucha luz reflejada por esta, quedando en algunas partes casi tan claras como la parte iluminada.
Aquí tienes un boceto previo que realizó el propio Edward Hopper antes de pintarlo en el lienzo:
Observa que el propio autor hizo las anotaciones que describen cómo incide la luz en cada una de las partes.
Ha quedado demostrado que las sombras también tienen su luz. Cuando dibujes o pintes, debes tener en cuenta que la luz se refleja en los objetos y que esta luz reflejada ilumina también a las partes en sombra.